De acuerdo con el National Institute on Drug Abuse de Estados Unidos (NIDA, por sus siglas en inglés) se puede abusar de los medicamentos con o sin prescripción médica de cualquiera de las siguientes maneras:

 Tomando un medicamento que fue recetado para otra persona

Tomando el medicamento en una dosis más alta o de una manera diferente a la recetada

Tomando un medicamento para un fin diferente para el que fue recetado

Esto aumenta el riesgo de generar una adicción o dependencia que no sólo afecta la salud de la persona, sino también a quienes le rodean.