Nadie es culpable de la enfermedad de la adicción. El alcoholismo, como todas las drogodependencias, es una enfermedad. Ni la persona que la padece ni los que están a su alrededor la han buscado conscientemente, de modo que no hay culpables.

Aunque es cierto que, en las enfermedades relacionadas con el consumo de drogas, es el propio afectado el que debe desear cambiar y responsabilizarse de su tratamiento, tanto los familiares como los especialistas pueden ayudarle.

La actitud que adopta la pareja, o las personas cercanas al enfermo, puede ser decisiva para motivarle a realizar correctamente un tratamiento adecuado para superar su enfermedad. Si necesitas orientación para hacerlo te invitamos a escribirnos al siguiente link: http://bit.ly/1qVO67N