En ocasiones, ante el enojo de convivir con personas que abusan de drogas, incluyendo el alcohol, se puede recurrir a la manipulación con la intención de generar culpa.

Se utilizan frases como: “Si me quisieras…, Después de todo lo que he hecho por ti…, Una persona decente no haría eso”. Sin embargo, en vez de ser útiles, la culpa en la persona con adicción lleva a un mayor consumo y aislamiento.

Es necesario comprender que es una enfermedad emocional, que afecta a la familia por lo que ambos requieren de ayuda especializada. Si este es tu caso, te invitamos a escribirnos al siguiente link: http://bit.ly/1qVO67N