La cafeína aunque es una sustancia natural, por sus efectos estimulantes en el cerebro puede generar una dependencia.

No es lo mismo, decir: “Me tomo un café para despertar” a “No puedo despertar a menos que me tome un café”. Las personas con adicción a la cafeína por lo general consumen de 5 a 6 tazas por día. Y se ha visto una correlación entre la dependencia a la cafeína y la nicotina.

Actitudes más saludables pueden generar la misma energía que el café, como correr, o hacer alguna actividad física como meditación o yoga, todas éstas sin poner en riesgo tu salud y bienestar.