Una forma de amarse a sí mismo, comienza con no criticarse de forma severa por los errores que cometemos. La crítica agresiva y no constructiva nos encierra en el mismo patrón que estamos intentando cambiar, nos sentimos menos capaces y generamos mayores reclamos hacia nosotros mismos. En cambio el ser comprensivos y amables nos ayuda a lograr ese cambio. Recuerda que si te has estado criticando durante muchos años, y pocas cosas han cambiado es porque esto no ha funcionado, por hoy intenta tratarte con aprobación y cariño y observa qué ocurre. ¡Comparte tu respuesta con nosotros!