Los medicamentos de prescripción que son abusados o autorecetados tienen efectos y consecuencias en el organismo. Las secuelas pudieran presentarse tras consumos únicos en estado de intoxicación, como por ejemplo las caídas en personas de la tercera edad por el uso de sedantes. Algunas de las más graves tras el consumo crónico son la dependencia psicológica y fisiológica, así como otras alteraciones en el funcionamiento y estructura del cerebro, por ejemplo: la atrofia cerebral y alteraciones cognoscitivas como la pérdida de memoria, atención, etc. Por esto es importante que los medicamentos sigan una adecuada prescripción médica que eviten riesgos en los consumidores. Más información.