Aunque hoy por hoy no exista como tal la adicción a la tecnología como padecimiento mental, sí es real que el aumento en la dependencia a aparatos tecnológicos, así como el interés en redes sociales puede contribuir a generar hábitos pocos saludables en donde la persona se aísla más y más por estar irónicamente “conectados” a los dispositivos electrónicos. Y aunque en la actualidad son de gran utilidad, te invitamos a utilizarlos con moderación, ¡Recuerda que nada en exceso es bueno!