¿Te has sentido alguna vez atado al estado de ánimo de otra persona? ¿Si él o ella está triste, tú también? ¿Tienes temor a sus reacciones? Si es así, probablemente estés emocionalmente dependiendo de otra persona, esto ocurre generalmente en ambientes familiares con adicción, en especial si eres pareja de una persona dependiente de una sustancia. “Sabemos que dependemos emocionalmente de una persona cuando nuestro bienestar está en función del otro”. El desprendimiento emocional significa separarse emocional y espiritualmente de otra persona. El desprendimiento emocional no es ignorar a la otra persona, o tratarla de forma agresiva, reclamándole o haciéndole sentir más culpable de lo que ya se siente. ¿Cómo desprendernos emocionalmente? Aprendiendo a hacer una pausa antes de reaccionar ante el comportamiento de la persona con adicción Separar a la persona de la enfermedad de la adicción, reconocer que su comportamiento es causado por la misma. “Es la adicción, no la persona” Ser responsables de nosotros mismos y dejar que los demás sean responsables de sus propias decisiones Tratar de entender a las demás personas, no por esto sentir lo mismo que sienten ellos Solicitar apoyo emocional de personas confiables que entienden la enfermedad de la adicción, ya sea a través de un especialista o de un miembro de los grupos de ayuda mutua Un aspecto importante es realizar el desprendimiento emocional con amor. Con amor implica ver a la persona más allá de su enfermedad, aceptarla tal cual como es, tratarla con respeto y amabilidad, no significa rescatarla o depender de su bienestar o sobriedad. “Enséñame a dejar a los demás su innato derecho a la dignidad y a la independencia, como quiero que ellos respeten el mío”. Cómo ayuda Al-Anon a familiares y amigos de alcohólicos.