«La última dieta”, “el estilo de ejercicio más novedoso”, “la mejor forma para acabar con la celulitis”. Vemos en los medios de comunicación muchas maneras de mejorar el aspecto físico de las personas pero ¿qué hay del bienestar emocional?

Se vale mantener un estilo de vida saludable que fortalezca los hábitos alimenticios y el bienestar corporal, pero si únicamente se la da prioridad a éste, el espíritu y el cuidado emocional quedan de lado y por mucho que una persona se “vea bien” si por dentro no está en paz con ella misma, difícilmente podrá disfrutar de la vida y de sus relaciones.