Qué relación tienen?

El consumo de drogas es un problema social que afecta a la persona y sus funciones dentro del contexto en el que se desarrolla. Por lo general el trabajo, después de la familia sufre las consecuencias del abuso de sustancias, ya sea porque tiene lugar en el horario de trabajo, o sea porque realizándose fuera del mismo impacta en el desempeño de la persona dentro de la empresa.

Organismos mundiales como la ONU, la OMS y la OIT (Organización Internacional del Trabajo) describen así la problemática:

…las sociedades pagan un pesado tributo por el uso indebido de drogas, tanto en términos económicos como humanos. Porque disminuye no sólo la salud de los trabajadores, sino también la productividad, la calidad y la competitividad empresarial. En consecuencia, aumentan los accidentes y enfermedades profesionales; los costos empresariales; el absentismo; los gastos sociales y sanitarios”.

Pero ¿qué factores influyen?

En el mundo actual en el que vivimos, las exigencias del mercado laboral, las expectativas financieras, el ritmo de vida y el nuevo contexto familiar pueden ser factores que promuevan el consumo de drogas, incluyendo el alcohol como una manera de evadirse de la realidad.

La adicción es una enfermedad multifactorial que no respeta sexo, edad, raza, religión, condición socioeconómica o nivel cultural. La enfermedad de la adicción responde a diversos factores: sociales, familiares, psicológicos y biológicos y su progresión se manifiesta en la necesidad imperiosa de consumo y la ingesta compulsiva de drogas incluyendo el alcohol.

 

Las consecuencias

Los trabajadores con problemas de adicción implican grandes pérdidas a las empresas con problemas como:

  • Ausentismo y llegadas tarde
  • Accidentes dentro y fuera del trabajo
  • Problemas en las relaciones laborales
  • Deterioro del rendimiento
  • Baja productividad
  • Altos niveles de rotación

El daño escalado por el bajo rendimiento laboral de quien consume drogas comienza al aumentar la cantidad de trabajo de los demás empleados y por lo tanto bajar la productividad global. Se disminuye la calidad de los productos o servicios y con ello la imagen de la empresa o institución. También se reduce la competitividad y esto amenaza la seguridad del empleo de los demás miembros de la organización.

La solución es de todos

La mejor forma para prevenir y detectar el consumo de alcohol, tabaco y otras drogas, es establecer un programa en el lugar de trabajo que:

 

  • Incluya un reglamento interno que regule el uso de sustancias
  • Brinde información sobre las consecuencias de consumir drogas
  • Genere hábitos saludables
  • Ofrezca un servicio de orientación psicológica
  • Canalice a los trabajadores con problemas de consumo de drogas para que reciban atención especializada.

 

Si bien la persona que abusa de una sustancia es responsable de atender su problemática, también su espacio de trabajo puede promover actitudes que aminoren o intervengan para la disminución de este problema.

 

 

Por último compartimos algunas cifras sobre el tema:

  • El 70 % de las personas con problemas de alcohol y otras drogas se encuentran trabajando.
  • El tabaco, el alcohol y la marihuana son las drogas de mayor consumo entre los trabajadores.
  • 1 de cada 8 trabajadores consume alcohol en exceso.

 

Psic. N. Pamela García García

Especialista en Adicciones por el Centro de Estudios Superiores Monte Fénix

Referencias bibliográficas:

– Organización Internacional del Trabajo (OIT)

– Comisión Nacional contra las Adicciones (CONADIC)

– http://www.controldeconfianzamor.com.mx/quienes-somos/