Creer que las drogas algún día dejarán de estar disponibles, es poco probable. Las drogas se pueden producir de forma natural, semisintética o sintética en función de su manipulación química. Algunas son reguladas por los Tratados de Fiscalización Internacional de Drogas para que su producción, fabricación, exportación, importación, distribución, comercio, uso y posesión sean limitadas exclusivamente para fines científicos. Tales drogas incluyen mariguana, cocaína, heroína, estimulantes de tipo anfetamínico y éxtasis. Son llamadas erróneamente drogas ilícitas son sustancias reguladas o drogas reguladas. Algunos países han optado por considerar a la mariguana como sustancia no regulada, pero en México está en revisión su estatus; pero esto no indica que su consumo sea perjudicial para la salud, como el consumo de alcohol y tabaco. Existen drogas como la cafeína, la nicotina y el alcohol, que no son reguladas por dichos tratados (llamadas erróneamente drogas lícitas) y pueden comercializarse bajo normas legales que dicta cada país. Son sustancias no reguladas o drogas no reguladas. El alcohol y tabaco son sustancias no reguladas y comercializadas como productos de consumo ordinario. Es algo que está presente en nuestra vida, en el día a día y en la convivencia con los demás. Ante esta disponibilidad lo que sí podemos hacer es informarnos y prepararnos desde la infancia para elegir una vida libre del consumo de sustancias psicoactivas, incluyendo el alcohol y el tabaco. Su consumo no es indispensable para el ser humano y es la mejor protección para evitar una enfermedad tan dolorosa como la adicción. Si bien las drogas siempre existirán, lo importante es la actitud que tengamos hacia ellas.