En el libro de “Los hijos de los alcohólicos” de Janet Woititz, describe que éstos tienden a ser sumamente leales, aún cuando esa lealtad sea inmerecida. Es decir se desarrollan estableciendo relaciones laborales, familiares e incluso de pareja desde una posición de lealtad absoluta, aunque esto les implique sufrimiento al permitir abusos de un vínculo poco recíproco.

La culpa les lleva a mantener esa lealtad, aunada a altos niveles de exigencia personal que son vividos con gran dolor. No es raro que sean también ellos quienes establezcan relaciones codependientes con parejas que padecen adicción. Los hijos que crecen con un padre con adicción requieren también de ayuda. https://lasadiccionestienensolucion.com/te-ayudamos/

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