El hogar es el lugar donde los niños aprenden de los padres, la forma en cómo relacionarse con los demás y cómo serán en el futuro.

Si un niño vive criticado, es probable que aprenda a condenar; si vive sintiéndose agredido, él será hostil con los demás; si vive sintiéndose avergonzado, aprenderá a sentirse culpable.

Por otro lado, si un niño vive con certidumbre, aprenderá a confiar. Si vive con sencillez, aprenderá a ser humilde. Si recibe amor y aceptación, aprenderá a vivir con cariño y respeto hacia los demás.