El alcohol socialmente y en especial para la cultura mexicana tiene diversas funciones. Ya sea para celebrar, un nacimiento, triunfo o evento importante. Que si perdió un equipo de fútbol, o falleció alguien. Pareciera que todas las razones son válidas para justificar el consumo. Y sin darnos cuenta nos volvemos permisivos al mismo, lo que disminuye la percepción de riesgo del alcohol o minimizar las consecuencias cuando alguien empieza a abusar de él. ¿Qué opinas? Compártenos tus comentarios