Una de las paradojas de la recaída es que mientras más marcados son los síntomas, menos capacidad tiene la persona con adicción de poder aceptar las críticas constructivas de la gente que lo rodea. Se requiere de diversas estrategias y recursos para evitar que la negación continúe. En ocasiones hablar con otra persona que tiene dependencia y se encuentra en rehabilitación puede ser de gran ayuda.