¿Eres de las personas que no pueden dejar de pensar en una situación, que se desgastan analizando de forma excesiva un problema o que incluso viven más en su pensamiento que en la realidad? ¡Cuidado! Tal vez sea una forma de evitar sentir la o las emociones que implican esa situación. Existen personas excesivamente racionales que no contactan emocionalmente, que incluso son percibidas como poco sensibles y empáticas, pero que en realidad se les dificulta manejar y expresar sus sentimientos por lo que eligen pensar, para no sentir. Con el pasar del tiempo, las emociones se manifiestan ya sea a través de síntomas en el cuerpo o de “explosiones” emocionales que generan conflictos. ¿Te resulta familiar? Recuerda que un adecuado manejo emocional es un factor de protección para la adicción.