Lo primero es pedir ayuda, muchas veces por querer auxiliar con “métodos” que supuestamente bajan la intoxicación, se pone en riesgo a la persona. Es importante saber qué fue lo que consumió y en qué cantidad, también tener su celular por si es necesario avisar a un familiar o a sus papás. A toda costa evita que conduzca. Si se encuentra inconsciente llama a una ambulancia lo más pronto posible, ponlo acostado de lado para evitar que se ahogue si vomita y trata de taparlo para mantener el calor de su cuerpo. No dudes en avisar a sus papás, querer “protegerlo” puede ser peligroso para él y para ti. Una vez consciente es importante que hables de lo que sentiste al verlo intoxicado, y como una forma de límite personal, hazle saber que no estás dispuesto a “cuidarlo” cada vez que lo haga. ¡Recuerda cuidarte a ti mismo, y procura tu bienestar!