Para muchas personas con adicción, el consumo de drogas o alcohol va más allá de las consecuencias negativas que ellos y sus familiares han tenido. Puede que hayan perdido su trabajo, que su relación de pareja esté por terminar o que sus hijos no quieran verlos; pero esto no será razón suficiente para que dejen de consumir, porque en realidad sin ayuda no pueden dejar de hacerlo. Recuerda que la adicción es una enfermedad en donde la persona consume a pesar del daño, de ahí la necesidad de un tratamiento integral y especializado.