A pesar de que hay una diferencia entre adultos, donde los varones beben más con un 62.7% y 40.8% las mujeres, el consumo de alcohol se ha ido equiparando entre los hombres y las mujeres adolescentes, siendo un 31.8% hombres y 28.1% mujeres. De igual forma en jóvenes de bachillerato de la Ciudad de México, la relación ya es de una a uno.

Esto nos habla del aumento en el consumo de alcohol en mujeres, quienes por su constitución física, son más vulnerables a sus efectos y por lo tanto a sus riesgos.