El consumo de alcohol durante la adolescencia tiene estragos que generalmente no se perciben hasta pasadas unas horas.
En el momento de consumir alcohol, este puede hacernos sentir más altos, guapos e inteligentes; sensaciones que duran poca cantidad de tiempo. Hay otras consecuencias que pueden extenderse por periodos mayores, como la resaca o el síndrome de abstinencia.

Estas pueden ser efímeras o de mayor trascendencia como un accidente vehicular y embarazos no deseados. Sin embargo cuando se trata del consumo de drogas, incluyendo el alcohol, no hay garantía de que las consecuencias no serán de por vida. Por esto elige tu vida, tu bienestar y evita su consumo.