El grado de facilidad o dificultad que un adolescente piense que tiene para conseguir las distintas drogas puede influir en su consumo. En nuestro país la disponibilidad de la marihuana resulta fácil para muchos de ellos, por lo que se refuerzan los deseos de experimentar con la misma. La marihuana puede ser la puerta de entrada para otras drogas, lo que aumenta el riesgo de generar una adicción.

El alcohol, tabaco y marihuana son las drogas más cercanas y a las que de manera más fácil llegan los adolescentes, por lo que es necesario que las medidas preventivas estén principalmente en función de estas drogas.